Ciudad Fortuna y más allá

Ciudad Fortuna siempre ha sido mucho más que una ciudad. Ya lo he dicho otras veces y vosotros lo sabéis: es un universo entero. Al principio de la serie, en Dados de cristal, se presentaba como una burbuja de límites inalcanzables. Ya en Trébol de madera, una carretera y una vía de tren empezaban a quebrar esa impresión. Ahora, en Destellos de oscuridad, descubrimos un mundo más allá. Y aun así, la ciudad no deja de crecer.

[Alerta spoilers: el texto puede desvelar detalles argumentales de libros anteriores].

Destellos de oscuridad nos lleva de nuevo a las calles y rincones de Ciudad Fortuna, más de trece meses después del desenlace de Trébol de madera. Vuelve a ser otoño, lo cual es un vínculo importante con Dados de cristal. Como el título del nuevo volumen indica, ahora la ciudad es más oscura, tal vez porque, sin saberlo, se acerque a su caída.

Muchos lugares que ya conocemos de Dados de cristal y Trébol de madera vuelven a ser importantes en este nuevo volumen. Regresamos a la taberna La herradura de plata, al famoso Café Greco, la discoteca El séptimo cielo, la comisaría, el hospital, la estación de mercancías, el cementerio o la majestuosa plaza de la Cornucopia. Por supuesto, la omnipresente Organización Heptágono mantiene su protagonismo.

Asimismo, en Destellos de oscuridad, se conocen nuevos rincones de la ciudad, como el monumental Foro de los Relojes, el selecto restaurante La novena nube, la sede central del Banco Fortuna, la estación de pasajeros, la importante Torre del Nimbo, y algún que otro recoveco inesperado que van a ser el escenario de reencuentros, peligros, trampas y conversaciones largo tiempo pospuestas.

En todo caso, lo más relevante de los lugares en los que se va a desarrollar Destellos de oscuridad es que van más allá de la urbe. Una vía de tren, que conocimos en el volumen anterior, conducirá hasta cierto pueblo y cierta finca, donde tal vez aguarden verdades muy anheladas. Y una carretera desembocará en una segunda ciudad, una muy distinta y distante de Ciudad Fortuna, con su propia historia.

¡Ciudad Fortuna se va a lo oscuro! Esto es Destellos de oscuridad.